Estar presente o ausente en la pareja

Una de las dificultades en la relación de pareja se dan cuando uno de los miembros refiere que presenta dificultades para definir su rol en la relación como pareja, desde el querer y no querer, amar o no. En este punto es importante que ambos miembros se encuentren definidos, desde el saber ambos cuál es su rol como miembros de la relación lo que conlleva a que la pareja en sus diversas modalidades pueda disfrutar de estabilidad o la calidad de la misma, evitando generar expectativas innecesarias cuando ambos miembros tienen destinos previos diferentes. El asumir un rol en la pareja va a brindar a esta un nivel de estabilidad como un norte de destino.

Las indefiniciones van a generar situaciones de estrés, ansiedad e inestabilidad en el proceso de la relación misma. El proceso de definir a favor o no en la relación puede desencadenar en escenarios no deseados por quien desea proseguir una relación, sin embargo, puede contener efectos nocivos al prolongar por lo que no puede ser. De ser necesario re-pensar el rol como pareja, es necesario realizarlo, el dolor ante una ausencia no podrá evitarse por quien desea, ama o quiere al otro. Sin embargo, cuando no es reciproco, el malestar puede generalizarse a traves de ausencias y otras manifestaciones.

El proceso de definir una relación va a implicar decisiones, y evaluar lo que se tiene y lo que se puede perder como producto de la misma en el plano de los afectos, lo cual también dependerá

El perdon en la terapia de pareja

EL Perdón en la terapia de pareja

En muchas ocasiones entendemos el perdonar como el acto de  dejar de lado los rencores y malestares  generados por las fricciones en la pareja, estos se convierten en un olvidar,  son procesos frecuentes y motivos de consulta. Además, por haber probado el perdón  y la situación no ha cambiado. Sin embargo va a depender también del nivel de afectación en cada uno de los miembros o en ambos miembros y las circunstancias que lo rodean, sean externas o internas.

El perdón dependerá de los valores de cada uno de los miembros, el tipo de relación que se lleva: asimétrica o simétrica, si existe dependencia emocional o no, de la propia autoestima de los integrantes de la pareja.

Los valores personales y el perdón, en este sentido entenderemos a  los valores como las propias creencias adquiridas en la infancia y la familia, creencias que rigen a nuestras vidas. A través de las cuales el individuo se relaciona con el medio social, valoraciones relacionadas con el bien y el mal, y que cambiaran de individuo en individuo como de pareja en pareja.

Cito por ejemplo, a un miembro de una relación   que provenga de un hogar que considera que la unión de pareja  es monógama y que dos personas que se juntan deben de estar unidas para toda la vida. En su familia de origen la infidelidad nunca se dio.  Las relaciones entre los padres se dieron dentro de un marco de respeto y afecto.  Por otro lado, el otro miembro de la pareja proviene de una familia donde la infidelidad es cotidiana y se debe de tolerar por el bienestar familiar y de la pareja. En este caso encontramos dos personas que provienen de hogares diferentes con valoraciones diferentes  como antecedentes, sobre las relaciones de pareja y familia. Es probable que ambos decidan un nuevo destino. Sin embargo, la historia familiar va a jalar ante algún impase  para alguno de los lados mencionados.  Ante el suceso  de infidelidad, la valoración del mismo pesara diferente en cada miembro, mientras que para uno pueda ser algo imperdonable, para el otro puede ser incluso algo de menor cuidado. La escala de valores en este contexto va a sopesar en gran medida para que se  re-evalué el perdonar la infidelidad o no en base a su escala personal interna.  Este un punto que el profesional psicólogo debe de explorar en la historia de vida de la pareja, como de las familias de origen.

Cuando hablamos de una relación asimétrica, es donde  la estructura de poder se encuentra en desbalance en relación al otro miembro. Por ejemplo, uno de los miembros trabaja y el otro miembro se dedica a los quehaceres domésticos. Si se tiene que perdonar algo, la asimetría  entrara en juego en una estructura de dependencia económica, por ejemplo. El “perdón” puede darse no tanto por los valores, sino por asimetría, al estar uno de los miembros desempoderados – sin poder- . Lo cual lo vemos con mayor frecuencia, cuando existe una madre con 3-4 hijos que depende económicamente de alguien que es un proveedor y cede por las circunstancias que le rodean, al preguntarse sobre su futuro y el de sus hijos. Incluso por la asimetría de la pareja se tolera y muy malamente en la violencia familiar y de género.

Ante la  existencia de una estructura de personalidad deficitaria en la pareja,  se han emparentado con un miembro de la relación que «tomo el poder» e influye en las decisiones de la pareja, donde se le tiene que consultar todo y para cada paso, que piensa por el otro, un otro que tiene dificultades para pensar por algún motivo en particular y que no se puede visualizarse solo o sola en la vida, el perdonarlo se da más por una necesidad. Una relación del tipo dominado-dominador, por temas relacionados a estructuras de personalidad. En este caso la terapia individual antes que la pareja es la indicada.

Cuando se presenta una  autoestima débil o un narcisismo deficitario, por parte de uno de los miembros en la relación, este quedara a merced del el otro miembro, cediendo para evitar la pérdida del otro, ya que sin el otro existe la probabilidad de no ser, gracias a la existencia del otro uno de los miembros se realiza.  La presencia de un yo deficitario implica intervención en terapia individual antes que terapia de pareja, sino será un proceso muy lento, como sembrar trigo en arena de mar.

El perdonar a uno de los miembros puede darse por diversas razones y cuando se da no necesariamente es por convicción y para que esto sea dado por convicción debe de darse además con el procesamiento de aquello que los separo. Si no será un proceso de corta vida en el tiempo, convirtiéndose en un intento más de la pareja por salir adelante.

Es importante que ambos miembros compartan una autoestima y valoración positiva como parte una relación sana, la simetría en el poder y acceso a la misma, debe de ser parte de la vida cotidiana de la la pareja.

El elegir una pareja con valores similares va a facilitar en gran medida la convivencia. Sin embargo no es un determinante para estar libre de fricciones en la relación de pareja, más si influye.

El perdón es un proceso, mas no es una decisión meramente, como se predica.  Es explorar: lo que los junta y que los separa. Para iniciar un proceso de terapia de pareja.

El perdonar por decisión de darse a pesar de las fricciones va generar una grieta no cerrada, la cual no aparece en el momento más se encuentra presente y que en cualquier momento de disconformidad puede volver a aparecer si no es abordada profesionalmente. Algunas parejas en consulta han mencionado: Nos hemos perdonado infinidad de veces y ya no creo en él o ella. Ahora deseo la separación.

Encontramos aquí una relación debilitada que puede volver a crecer, solo que debemos tomar conciencia del impacto de la misma. Las promesas incumplidas como acuerdos rotos.

Cuando se incumple un acuerdo,  sea del tipo que sea, y no será infidelidad, podrá ser quizás pequeño o casi trivial, no va a ser motivo de separación  más si el detonante, lo que impulso a la pareja a separarse. «La gota que derramo el vaso de agua» en palabras de algunos consultantes. El pedir perdón en estos contextos ha perdido su efecto conciliador.

Exceso de amor en la pareja

En el presente artículo es una invitación a la reflexión en relación al  amor incondicional que llega más allá de los  límites y que  los sobrepasa,  en el caso del amor maternal cuando por amor es permisivo/a o en alguno de los padres,  generando un espacio de  complacencia hacia al hijo o hija, brindándolo  todo,  a costos muy alto para los padres y con un desenlace no muy alentador en el infante, niño y adolescente.

Cuando los hijos desconocen los limites, y se dedican a la demanda libre y sin frenos estos terminan por asumir que es una obligación el amor desmedido y el satisfacer todas su necesidades por parte de los padres o tutores, llegando a fracasos en el espacio escolar por ejemplo; donde la complacencia extrema ya no está presente y todos son tratados con equidad en el espacio educativo  (o por lo pronto con  tendencia). Aquel infante que ha sido tratado con complacencia extrema por “amor” encontrara un espacio adverso donde sus demandas no se satisfagan, llegando aquellas a lindar con la desmotivación.  Es el caso cuando la tolerancia a la frustración es muy baja.

En este sentido, los niños deben de atravesar situaciones relacionadas con la frustración, situaciones controladas por los padres donde estos tendrán que ganar en ocasiones y perder en otras, ya que la vida se desarrolla en sentido para los seres humanos.  Al respecto experimentara situaciones donde saldrá victorioso y otras en las que aprenderá a resignarse por el resultado no esperado.  En la vida real las cosas nunca salen como uno las planificado,  surgen con resultados similares y que incluso no llegan a ser los óptimos por las diversas situaciones que se conjungan en el desarrollo infantil,  podríamos citar al respecto el caso de participar de un juego cooperativo como es el futbol, en el cual no sabremos cuáles serán los resultados y es parte de la vida el aprender a ganar y perder, para poder desarrollar la tolerancia ante la frustración o perdida, en base a situaciones normales y cotidianas de la vida.

En el vínculo de pareja, encontramos casos en la que uno de los miembros brinda su “amor sin límites, que incluso llega a asfixiar y ahora al otro. Con el  deseo implícito de desear recibir lo mismo a cambio, deseando un relación en la que la pareja no se separe, en el que ambos miembros se sinteticen en uno solo. Lo cual nos  lleva a que el amor del otro en exceso y desmedido llevara a perder al otro en su individualidad.

Cuando encontramos un amor en desmedida ya podemos estar hablando de un proceso relacionado a un proceso de dependencia hacia el otro miembro o de la presencia de carencias afectivas.

El dar todo hacia el otro sin límites no es el camino para “retener” a la pareja, es el camino más cercano a una perdida, es donde el déficit en un amor sano propio se encuentra ausente.  Déficit en un narcisismo sano.  De amarse y quererse, es un primer paso para poder ser feliz en una relación de  pareja, el de poder amarse primero para poder amar al otro sin descuidar la propia integridad.

En el vínculo de pareja el amor sin medida y extremo no va a llevar a buen puerto, solo uno de los miembros atravesó y dio la vuelta al mundo,  en expresión cotidiana “Esta corriendo mientras el otro está caminando” una relación desacompasada, en la que ambos  debe de caminar mas o menos a un mismo ritmo y tiempo.

Si, la relación termina, uno de los miembros llegara  a un espacio de tristeza por haber dado y entragado todo, mientras que el otro solo dio un poco y quizás lo necesario. En las relaciones afectivas es importante dar en proporción. Sin sacrificios ni inmolarse por el otro miembro.  Son comunes las expresiones de sentirse  “presionado” cuando el otro se siente forzado a hacer algo que por ahora no se siente listo o dispuesto. En este sentido es importante evaluar hasta qué punto ambos desean involucrarse en la relación.

Competencias en alumnos de Psicología

En los últimos años el ejercicio del rol de ser psicólogo se encuentra cambiando con un mayor nivel exigencias y de lo cual no escapan los alumnos del internado,  presentándose diversos factores que contribuyen a aquello, entre los que se puede nombrar: Exceso de trabajo y responsabilidades,  desenvolvimiento personal ante los usuarios de los servicios, y usuarios con  mayores  demandas (resultados inmediatos en tiempos reducidos).

Las universidades se encargan en formar en competencias técnicas, las cuales no siempre son suficientes  para convertirse en un psicólogo exitoso que experimenta satisfacción con su labor. Al respecto se hace necesario incorporar competencias  que permitan manejar  los nuevos escenarios que afrontara el alumno de internado, en la que se suma y desarrollan herramientas para su gestión eficaz  personal –profesional.

Del breve panorama descrito,  es necesario abordar:

El psicólogosu desarrollo como persona en los espacios clínicos, educativos y organizacionales.

Los alumnos de internado elijen un área de especialización en la etapa de prácticas profesionales  sea esta como la clínica, la educativa y organizacional (principalmente en nuestro medio).  Estas elecciones dependen de muchos elementos como: su capacidad y preferencia en las áreas mencionadas,  rasgos de personalidad, experiencias personales de éxito-fracaso,  o características personales que les dieron mejores resultados.

Encontrándose en algunos casos una evasión por participar de espacios de desarrollo en la persona del psicólogo para evitar abordar  situaciones personales que se encuentran pendientes de resolución y que inciden directamente en la negación de un elemento personal  afectado su desempeño personal, como  en el internado.

El fin de la propuesta no apunta al desarrollo personal, proceso que es amplio, continuo y que corre a cuenta del propio alumno, la propuesta apunta al desarrollo profesional, que contempla elementos para el mejor desempeño y entre ellos uno básico: la persona del psicólogo.

Sin dejar de atender la evolución de etapas  iniciales  del profesional en su desempeño como psicólogo.

El abordar la persona del psicólogo (en alumnos  de internado) implica gestionar los elementos de mayor resalte que puedan interferir en su labor como profesional, provenientes del ámbito personal.

En relación a las características  y desarrollo del psicólogo/terapeuta algunos expertos  han referido:

“Claudio Busto (2001)  citado por Hirsch, P.[1] expone en un artículo lo definido por diversos autores relevantes. Menciona, por ejemplo, que para Beck (1979) se considera necesario, pero no suficiente, que el terapeuta posea tres competencias relacionadas: aceptación, empatía y autenticidad.  Esas tres condiciones ya habían sido por Rogers (1951).  Por aceptación se entiende no juzgar lo que el paciente dice, siente o piensa. Empatía se refiere a la habilidad del terapeuta de entrar en el mundo del paciente y experimentar cognitiva y afectivamente el mundo como lo hace este. La ultima habilidad, la autenticidad, se refiere a la franqueza del terapeuta con el paciente, para que tenga una imagen realista de lo que puede (y no puede) esperar sobre el terapeuta o la terapia…

Minuchin y Fishman (1992), postulan que la principal cualidad  con la que se debe contar como terapeuta sistémico es la espontaneidad, la cual definen como la habilidad para “emplear diferentes aspectos de sí mismo en respuesta a contextos sociales diversos”…

Freud (1912) recomendaba el análisis personal para minimizar la probabilidad de que los propios conflictos inconscientes del terapeuta interfiriesen en la compresión, interpretación adecuada y manejo de la transferencia de los pacientes…

Irónicamente Krasner (1963 en Phares, 1997: 302) plantea un ideal del terapeuta, que no existe en ningún ser humano, lo cual no le quita el mérito de ser inspirador y de brindar algunos señalamientos de cualidades a desarrollar:

“El terapeuta ideal es: maduro, bien adaptado, compasivo, tolerante, paciente, amable, discreto, que no elabore juicios de valor, aceptarse, permisivo, no crítico, cálido, agradable, interesado en los seres humanos, respetuoso, que estime y trabaje por una relación interpersonal democrática, libre de prejuicios raciales y religiosos, que tenga una meta valiosa en la vida, amistoso, alentador,  optimista, fuerte, inteligente, sabio, curioso, creativo, artístico, orientado hacia la ciencia, competente, confiable,  un modelo que el paciente pueda seguir,  lleno de recursos, sensible en términos emocionales, consciente acerca de si mismo, perspicaz  acerca de sus propios problemas, espontaneo,  con sentido del humor, que se sienta seguro  de su persona, maduro acerca del sexo, que crezca y madure de las experiencias vitales, que tenga una alta tolerancia a  frustración, confiado en sí mismo,  relajado, objetivo, autoanalítico, consiente de sus prejuicios, no servil, humilde, escéptico pero no pesimista o modesto, consistente, abierto, honesto, franco, con gran preparación técnica, dedicado en un sentido profesional y encantador”

Objetivos de la presente propuesta:

  • Generar un espacio de autoexploración y autocuidado de la persona del psicólogo
  • Fortalecimiento de competencias blandas para el desempeño personal-profesional
  • Brindar una metodología de intervención individual y de grupo aplicable al área clínica educativa y organizacional principalmente
  • Manejo de herramientas personales aplicables a diversos espacios de intervención privada como pública.

Metodología

La modalidad de intervención  se dará a través de  seminarios –talleres intensivos de fin de semana,

Los recursos técnicos de intervención grupal  y acompañamiento  provienen principalmente del:

  • Psicodrama
  • Psicoterpia por el arte
  • Arteterapia
  • Psicoterapias psicoanalíticas.
  • Facilitación grupal
  • Recursos provenientes del ámbito organizacional
  • Experiencias vivenciales grupales – individuales.

Beneficios de la presente propuesta:

  • Ampliar el marco de experiencias  vivenciales-técnicas en los participantes: permitiendo interaccionar con recursos convencionales y no convencionales para  ensayar nuevas formas de expresión.
  • Adquisición de recursos expresivos que permitan mejorar las capacidades de comunicación (personal-profesional). Además de aprender a sobrellevar con seguridad y confianza situaciones que pudiesen resultar inhibidoras.
  • Fortalecer el trabajo en equipo y de cooperación. Permitiendo generar comportamientos cooperativos antes que competitivos,  sin dejar de  lado el comportamiento autónomo del participante.
  • Desarrollo de la   imaginación, espontaneidad y  creatividad
  • Conocimiento y comprensión de la propia dinámica interna.
  • Incremento de recursos técnicos profesionales para el desempeño laboral.
  • Desarrollo de habilidades básicas inherentes al psicoterapeuta.

[1] Hirsch, P. (2012).  Arte y oficio del psicoterapeuta: Estrategias para su autodesarrollo y cuidado. Buenos Aires: Psicolibros ediciones. Pp21-23

Curanderismo y problemas de pareja

Cuando la pareja busca diversas salidas: Terapia de pareja o asistencia al curandero.

Hace algunos años atrás las parejas en las historias de los abuelos asistían a los curanderos, pitonisas, lectoras de tarot. Fenómeno que en la actualidad,  observamos que se sigue dando en nuestro medio, en algunos postes se observan avisos de curanderos del norte que amarran a la pareja para toda la vida, o pitonisas que leen el tarot y que ofrecen el volver el ser amado, en 3 días en un volante, algo similar se da en algunos diarios de circulación nacional.

Reuniones que tiene como característica la de llevar la foto del ser amado, una prenda íntima, un mechón de cabellos, donde será llamada su “alma” en base a conjuros, cantos, fumadas del tabaco, etc.

Espacios que son conocidos en la ciudad de Piura  y Chiclayo, por citar algunos, en la ciudad de Lima son frecuentes y se publicitan incluso por canales de televisión.

En relación al curanderismo encontramos en fenómeno del hechizo, donde el principal elemento es hacer saber: “comunicar” que se ha hechizado a ese alguien para que inicie el proceso de sugestión (lectura desde la psicología).

Si ese alguien se enteró que tiene un amarre, de por si inicia un proceso de sugestión que lo llevara a caminos insospechados o simplemente a ninguno, acorde a su sistema de creencias, si se cree o no es un gran punto de referencia.

La tradición curanderil refiere que cuando se ha embrujado a alguien, ese alguien para liberarse de aquel hechizo necesita de un curandero o brujo “mayor” con mayor poder y fuerza para  romper el hechizo.

Una consultante al servicio de terapia de pareja  refirió que había invertido una diversidad de  visitas,   en promedio 1000 nuevos soles (unos 350 dolares por visita). Utilizando gran parte de su salario para el proceso de limpieza y para cambiar su suerte. En otro caso me refería que se le solicitaban perfumes de marcas reconocidas como Paco Rabban, Dior, Gucci, etc. Para atraer al alma con “fragancias dulces”, fragancias que serían utilizadas en el amarre.

Ante el dolor humano por amor citare una frase de Victor Frankl: En las trincheras de guerra, no existen ateos.

Ante el dolor humano por la perdida, el ser amado se  busca soluciones que escapan a lo extraterrenal, el buscar  una solución con lo divinidad.

Aquellas pacientes que acudieron al curandero, mencionaron: Ud. Es el último recurso, Es curioso observar que el profesional psicólogo puede ser el último camino cuando no funcionan los intentos de solución extraterrenales.

Al respecto mi recomendación seria el que se busque un psicólogo especialista atención de terapia de parejas como primera alternativa.

Los consultantes ante problemáticas de parejas asisten a diversos dispositivos con el afán de evitar lo inevitable: la ruptura o la pérdida del otro. Sin embargo, se debe contemplar también aquella posibilidad. La de dejar partir, cuando uno de los miembros no desea ningún tipo de relación afectiva y el considerar la posibilidad de un encuentro cuando ambos desean reconstruir la relación. Las relaciones de pareja se construyen en base al deseo reciproco de la pareja, al respecto existen diversos elementos que los vinculan y que serán abordados en otro articulo.

Fracaso en la relación de pareja

Dr. Alvaro silva

Fracaso en una relación de pareja

Porque fracasa una relación de pareja

Las relaciones de pareja están dando en cada momento giros que desencajan a sus miembros, la mujer se desliga del rol clásico de sometimiento al hombre, elije sus momentos de ocio, lugares de esparcimiento, amistades, estilo de vida, y si desea tener un encuentro amoroso lo concreta en las mismas condiciones que el hombre, antes socialmente vetadas.

Las iniciativas tomadas por el sexo femenino son muy variadas desde lo personal, social, afectivo, sexual, laboral, maternidad, etc. La estructura asimétrica sometedor-sometido se diluye, convirtiéndose en una relación simétrica que descoloca al hombre al no encontrar un espacio donde encajar con el rol clásico de sometedor.

Es frecuente observar ahora en distintas partes del Perú, que un grupo de mujeres se reúne para celebrar un acontecimiento sin la presencia de un hombre. El machismo en el Perú, se está cayendo y el hombre se desequilibra al no encontrar ahora a una doncella a quien salvar ni a quien defender. Lo que genera un conjunto de inseguridades en el hombre contemporáneo, donde las enseñanzas tradicionales de la infancia quedan desligadas en el tiempo.

Quedan algunos retazos de relaciones machistas y asimétricas que se observan en las relaciones de violencia en la pareja y familia, donde el hombre ante la pérdida de poder del dialogo y de otras áreas recurre a la coerción por la violencia, así también se han incrementado las separaciones de pareja por mujeres que ya no toleran el maltrato, la historia de los abuelos que seguían juntos hasta el fin de los días se diluye en el tiempo de las historias, donde ahora se reconstruyen historias donde la pareja se junta en busca de una relación simétrica y con una estructura de poder fluctuante, la dirección de la poder cambia por intervalos entre los miembros y ya no es parte ni potestad del hombre, si no de ambos miembros. “la pareja para sobrevivir en estos momentos tiene que aprender a compartir el poder en la relación, y esta no puede quedar en un solo y único miembro, si no en ambos”. La familia Ingalls, solo existe en la pantalla del TV. La responsabilidad del éxito de la relación de pareja y familia es ahora parte de los dos, y el éxito de la pareja y la familia no es deber de la mujer. En un dialogo con una joven sobre los cambios del amor señalo un elemento del discurso del enamorado indignado: “no sabes las cosas extraordinarias que una enamorada hace y sorprende a su enamorado”. Escena que generan desequilibrio y muy probable separación.

Encontramos a un hombre que tiene que aprender a convivir con la mujer que gana más en un trabajo que un hombre, que ejerce roles de liderazgo, encontramos un hombre va perdiendo poder, y el hombre debe de evitar el colapsar ante la pérdida del control.

Citando otro caso de una joven, ejecutiva de una empresa exitosa con un salario que doblaba el ingreso promedio de su pareja masculina. Este busca sabotear el desarrollo profesional de ella, atacando el narcisismo sano de la misma, acusándola de los errores en la relación, mostrando celos por el desarrollo de la misma. Es cuando nos preguntamos:

¿Qué está sucediendo con el desempeño exitoso de la mujer y el impacto en el sexo masculino?

Le cuesta trabajo la no aceptación de los nuevos roles de la pareja.

En otra caso, encontramos que la relación comienza a caerse por el deseo del hombre de querer ejercer un control en las prendas de vestir de la pareja, “el prohibir que use tacos y minifaldas” señalando que será observada por otros y que no le gusta aquello, se vislumbra un sentimiento de inseguridad masculina en otra etapa mucho más cotidiana y domestica

La crisis se incrementan actualmente en la pareja, muchos por los cambios de roles tradicionales, la propia inseguridad masculina, se consolida como uno de los actores principales y más frecuentes en la inestabilidad de la relación de pareja.